
Aprendiendo de los alumnos
El 13 de diciembre se cumplirán catorce años que coordino un taller vivencial en el instituto de rehabilitación de personas ciegas y baja visión Josefina C. de Bignone de Vicente López. Comencé en el 2006 colaborando con Lourdes Simán, encargada de la Biblioteca del Instituto y creadora de un taller al que llamó “Taller de Audiolectura”, con esa modalidad expuse dos veces en el “Congreso Latinoamericano de Arte y Rehabilitación” que organizaba la Municipalidad de Vicente López.
En el año 2010 presenté un proyecto sobre un nuevo taller que cambiaba algunas cosas pero que aceptaba al paciente como principal protagonista, permitiendo conocer sus problemas, sus vivencias, compartir sus recuerdos e historias de vida, por eso el título de Taller Vivencial , el resto del nombre “¡De Tal Palo…! ya que todos somos astillas del mismo palo: LA PALABRA.
Este taller se convirtió en “Una herramienta para la Rehabilitación” porque cada uno de los que concurre tiene la libertad de expresarse, participar y también sólo escuchar, esa libertad que muchas veces pierden en sus ambientes cotidianos, con su familia y hasta por decisión propia. Cuando cerré mi exposición en el séptimo Congreso mencionado anteriormente lo hice pidiéndoles a los psicólogos presentes de Argentina, Chile, Uruguay, que cuando derivaran pacientes a los distintos talleres, consideraran el taller de escritura como uno más, pues los pacientes que están en el proceso de rehabilitación solo han perdido o están perdiendo la vista, pero no han perdido su imaginación, su creatividad y su capacidad para escribir.
Cuando el taller comenzó asistieron solo cinco pacientes, en la actualidad se dicta en dos días y el promedio es de catorce asistentes los jueves y veintidós los viernes, ellos escriben a mano alzada con un tamaño de letra que puedan ver, quienes tienen baja visión; quienes no ven, lo hacen con la computadora utilizando un programa parlante, dictándole a otra persona no vidente que lo escribe en su computadora o dictándole a alguien que ve y puede transcribirlo.
En estos días de aislamiento tengo un grupo de WhatsApp llamado Escritores del Bignone con dieciocho integrantes, donde cada semana escriben sobre una consigna
Es mi deseo seguir trabajando, creciendo y aprendiendo al lado de todos los que concurren al taller, porque sin ellos y sin el apoyo permanente de las autoridades, profesionales y empleados del instituto, mi trabajo perdería su encanto.
He publicado libros, recibido distinciones, participado de antologías pero el mayor reconocimiento que recibo es el saludo de cada unos de los pacientes y saber como los fortalece en su vida diaria asistir o participar del taller.

Rubén Ernesto Saura
Argentino. 65 años. Vive en Vicente López. Encargado de personal no médico en clínica de cuidados paliativos. Además desde el 13-12-2006 hasta la fecha es Coordinador del taller vivencial “¡De Tal Palo..!” Orientado a la escritura en el instituto municipal de rehabilitación de personas ciegas o baja visión: Josefina C. de Bignone. Profesor de Yoga - Reikista y Masajista. Estudios terciarios de periodismo. En el año 2007 fué presidente de la seccional Delta Bonaerense de la SADE.