“El arte es una especie de innata unidad que se apodera de un ser humano y lo convierte en su instrumento. El artista no es una persona dotada de libre albedrío que busca su propio beneficio, sino un arte que permite hacer realidad su propósito a través de él”. Carl Gustav Jung
Los Arcanos en seda son una serie textil de tapices únicos, de gran formato hechos a mano. Teñidos en seda natural y exquisitamente confeccionados por Silke, fueron exhibidos por primera vez en 1998 en el Museo Nacional de Arte Decorativo, multimuestra de esta ópera textil donde se presenta el libro homónimo con imágenes, simbología y texto bilingüe, que en 2008 se publica en formato de cartas y mini libro. Tras centenares de muestras y décadas de visitas guiadas, el oficio y la mirada interna de Silke cuenta de las imágenes- luz que recibe y crea como artista, imbuidas de simbología y conocimiento como vibración hecha conciencia que llega al Alma desde el color.
El lanzamiento para la realización de esta serie, no está ligado al tarot ni es casual. Como todo trabajo de Silke, hasta sus libros -que llegan a una retrospectiva de su vida y obra en actual edición- parecen impulsados por el viento del espíritu….
Si bien la artista ya había estudiado una diversidad de conocimientos holísticos, su sed por saber le acerca definitivamente el conocimiento arcano con el que crea la serie Los Arcanos en seda, desde las aguas de su misma obra, en plena gira europea de la serie Los 4 elementos.
Al conversar con la esposa del embajador argentino en Moscú sobre el hilo conductor de su nueva investigación creativa -centrada en el misterioso origen, destino y sentido de la vida- esta, le acerca las cartas de los arcanos mayores del tarot de Aleister Crowley.
Es tan potente el contenido simbólico, que esa noche la artista sueña con los arcanos. Despierta sabiendo que hará esas imágenes oníricas desde un Universo lleno de vida, aunque no sabe cómo. Al penetrar en el conocimiento arquetípico y evolutivo que trae aparejado la nueva serie, surge una profunda conexión vivencial con el contenido, en ella misma.
Al regresar de Moscú, Silke investiga cada arcano como artista. No desde lo adivinatorio, sino desde su complejo contenido arcaico. Así comienza a crearlos, en una explosión creativa sin orden establecido. Recibe en su interior la imagen que le regala su propia conciencia, sin intermediarios, en un caos aparente que precede a la urgente génesis de cada tapiz, para dar a conocer su sentido.
Realizados en ese tejido vital que es la seda (teñida artesanalmente en miles de matices y dibujada en costura a mano y a máquina), el volumen vivifica aún más las luminosas imágenes que canaliza.
Procesos en los cuales la artista y heroína, viaja y crece interiormente, sin saber aún cuan transformadora será -no solo para ella- su aventura lúdica y en serio, como cuando juegan los niños.
Su amiga y escritora Florencia Güiraldes, le sugiere escribir un libro de los saberes de cada arcano. Los datos son tantos, que se asemejan a aquel caos creativo por un tiempo, hasta que -en un viaje al sur argentino con su esposo- la cordillera es testigo de un auténtico “copy- paste” manual. Este collage preliminar, ordenó los contenidos escritos a mano, para comenzar a trabajar en lo que luego fue el libro bilingüe Los arcanos en seda con 40 imágenes de los 22 tapices a todo color.
La presentación del libro (galardonado por la Cámara Argentina de Publicaciones como Mejor Libro de Arte editado en Argentina, Mención de Honor en la 15ª Convocatoria del Concurso Bienio 1998 – 1999), acompañó la mega muestra homónima en el Museo de Arte Decorativo inaugurada en 1998. Esta auténtica ópera visual sinestésica, con música, coro, actores, trajes hechos a mano, videos y escenografía, comenzaba desde la fachada del edificio con una enorme araña en su red; como prolegómeno al mundo de las tejedoras y de la conciencia.
Para aquel momento, la experiencia sensorial era un verdadero adelanto de lo que hoy conocemos como arte inmersivo, faceta que la artista también explora hace unos años.
Sobre los 23 tapices que conforman esta obra, una no pertenece a los arcanos. Simboliza la suma de todos ellos concentrada en la imagen de un bailarín -arte de tapa del libro- que, en el año 2008, también se publica en formato de cartas y mini libro guía que resume el significado simbólico de Los arcanos en seda:
“¡La vida es un gran baile!, dice Silke sonriendo al público que llenó la sala de su atelier en la visita guiada gratuita. “Somos humanos, y a veces nos hacemos difícil la vida que, en sí, es compleja, pero podemos hacerlo más simple. En los arcanos no hay bueno ni malo, solo hay energías. De esto trata toda esta serie que comprendí mejor cuando la ordené en “bloques”.
Las 22 cartas corresponden a los arcanos mayores del tarot. El 0 puede ir adelante. Los 21 restantes conforman tres etapas en grupos de siete cartas:
– Arcanos 1 al 7 desde que nacemos hasta los 28 años. Contienen información básica para sobrevivir, crecer, desarrollarse, enamorarse, traer hijos al mundo. …
– Los arcanos 8 a 14 establecen un peldaño introspectivo hasta a los 56 años, etapa para descubrir quiénes somos en verdad, quien es nuestro Ser en el hacer de la vida.
– A partir del arcano 15 al 21, desde los 56 años en adelante, estamos más aptos para ver, aceptar y resolver algunos temas, para integrar la dualidad y avanzar en el camino espiritual.
“Si resolviéramos todos los problemas de esta vida, seríamos angelitos… Apenas somos seres humanos con nuestras falencias, pero muy deseosos de aprender. Por eso nos convocan estos temas y estamos aquí, juntos”, Silke.
Las formas de los números y lo imbuido en cada imagen, apoya al significado que portan los arcanos. En su simbología, solo existe lo que es, nada es malo ni bueno en sí mismo. Los arcanos mayores, no corresponden a una sola cultura, son universales.
PRIMERA ETAPA
Podemos hacer una analogía de esta etapa con los 10 mandamientos, donde nos indican lo que está bien y lo que está mal, lo que se debe hacer y lo qué no.
Arcano 0- El Loco: El cero, lo ovoide, sugiere libertad en la totalidad de posibilidades del Ser. Sin saber quiénes somos ni hacia dónde vamos, no tenemos aún huellas digitales siquiera. El loco, es como un comodín. Marca el ingreso a la vida como hoja en blanco y puede ir en cualquier lugar, lanzándose para ver de qué se trata esto de vivir, con total desparpajo. Simboliza el amor puro y la ternura. Es el niño interior juguetón que estará siempre en nosotros, al cual es tan importante mimar y mantener. Punto en el que se enfoca Silke en sus talleres y su Masterclass de creatividad.
Arcano 1- El Mago: Representa al Padre celestial, al aspecto yang. Munido de los cuatro elementos que nos componen (fuego en cálida vitalidad de la sangre, aire en nuestro respiro agua en los fluidos corporales y tierra en nuestros huesos), va directo hacia adelante con estos elementos simbolizados en un bastón (fuego), una espada (aire), una copa (agua) y en el oro (tierra).
Simboliza al Hemisferio izquierdo y la lateralidad derecha. Es lógico y racional, remite al cazador enfocado en lo que quiere conseguir. Su postura es la de un pararrayos, erguido entre cielo y tierra. De la tríada espiritual al cuadrado de la materia, la energía baja a la tierra sin titubeos a través suyo.
Arcano 2 – La Suma Sacerdotisa: Es la Madre celestial, lo ying. No abre caminos ni va hacia adelante. Irradia espiritualidad y conoce el mundo de lo subconsciente. Porta el libro del conocimiento y esa sabiduría mística que ignoramos tener, para que la descubramos en la vida cotidiana. Ella permanece serena, de brazos cruzados. A la vez (a diferencia del arcano 1) aunque no haga todo perfecto, es holística. Invita a rever como valoramos el dar y el recibir.
Arcano 3 – La Emperatriz. Es la madre terrenal. Tan productiva y repleta que se dificulta mirar de tanta abundancia caótica. Representa la creación, a la tierra en todos sus nombres, a Gaia, a la pletórica naturaleza que da y da simientes sin importar cuantas crezcan o no. En analogía con los dones de los seres humanos que se traen en abundancia, sin posar la mirada en si se usan o no. Nos dice: “Ama y deja que te amen”.
Arcano 4 – El Emperador. Es el padre terrenal. El orden y el progreso. Desaparece el caos y se ordena con esfuerzo y cumplimiento hacia el progreso. Es la semilla que recibe riego y sustrato… La “infancia” donde se nos indica que es correcto hacer para aprender a manejarnos y a sobrevivir en la sociedad. Es reconocer y cuidar los talentos para desarrollarlos. Es el árbol genealógico, la historia, la honra al pasado hacia el follaje del futuro. Las líneas horizontales simbolizan temas aislados para facilitar su aprendizaje y las verticales, son las coordenadas integradoras del pensamiento.
Arcano 5 – El Sumo Sacerdote: La imagen pomposa representa la superioridad del estudio y el saber relacionado con la ley y con el poder en diversos aspectos, extensivo al poder de la palabra. Marca la etapa de enseñar y aprender. Mediador entre lo humano y lo divino, simboliza cinco elementos, al sumar el espíritu a los cuatro básicos agua, tierra, aire y fuego.
Arcano 6 – Los Amantes (y la decisión): Aquí comenzamos a interesarnos por el otro, aunque de una forma inmadura aún. Es la adolescencia, las hormonas a pleno que nos sacan de aislamiento y nos unen entre seres humanos en el inicio de lo que significa el amor. En la imagen, está cupido que lanza su flecha a los enamorados.
El seis en alemán (sechs), suena “sex”. En este arcano comienzan las relaciones sexuales. La consumación, se manifiesta simbólicamente en el tapiz en la estrella de David como unión de opuestos, el cielo y la tierra a partir de un triángulo hacia arriba (masculino) y un triángulo hacia abajo (femenino). Nos fundimos en el otro, lo “amamos” fanáticamente.
En este nivel, cuando no se ama más, se odia luego de que el otro no cumple con la imagen narcisista que hemos proyectado. No obstante, en la imagen se insinúa delicadamente una rosa que representa el gran amor al que podemos llegar, en potencia. Esto viene de la mano de la responsabilidad, a dejar la casa paterna. para crecer y tomar decisiones maduras.
Arcano 7 – El Carro: Lograda una estructura, habiendo estudiado para desarrollar nuestros talentos, ya conocida la sexualidad y armada a familia, ¡hay que mantenerla ¡expresa Silke provocando risas generalizadas. Ahora, salimos a la vida con discernimiento. Es el arquetipo del héroe que busca lo que necesita. De tan ocupados que estamos, no nos hemos detenido en saber quiénes somos… Entre Kronos y Kairós, atenderemos ese anhelo cuando estemos lo suficientemente fuertes para ver de frente nuestros aspectos internos.
SEGUNDA ETAPA
A partir de este segmento donde nos encaminamos a la autorresponsabilidad; la analogía se acerca al Óctuple noble sendero budista que abarca la recta comprensión, el recto pensamiento, las rectas palabras, rectas acciones, recto esfuerzo, rectos medios de vida, recta atención, recta concentración. Ya nadie nos indica lo que debemos hacer o no.
Arcano 8 – La Fuerza: Es un arquetipo Yin, femenino (más allá de las temáticas de género) que invita a la introspección. Envuelta en un marco se concentra en el adentro, se mira sutilmente, con sensibilidad y sensualidad simbolizada en las largas cabelleras con las que envuelve al Rey de las fieras: al león. Si este arquetipo fuera masculino, quizá mataría al león de nuestros instintos e impulsos, pero ella lo enreda y muy de a poco… lo domestica.
Arcano 9 – El Ermitaño: Inaugura un espacio de silencio e introspección, de encuentro con el propio espíritu.
Arcano 10 – La Rueda de la Fortuna: Todo cambia permanentemente. Como las estaciones del año, los ciclos se renuevan y no estamos exentos a ello. El éxito no se retiene por siempre ni los malos momentos se eternizan. Del dinamismo de la vida aprendemos el sentido del apego y el desapego pues la única constante, es la impermanencia. Nacemos con los puños cerrados y hasta el final tratamos de asirnos a la vida… hasta que soltamos y dejamos este plano de experiencias.
Arcano 11 – La Justicia: Simboliza la búsqueda de armonía y equilibro hacia la claridad objetiva y el discernimiento que dará un juicio justo. Es la ley que da a cada uno lo que le corresponde, desde la causa y efecto, Karma y Dharma.
Arcano 12 – El Colgado: Indica una encrucijada. Un momento difícil donde no hay escapatoria, hacia ningún lado. Aunque pueda asustarnos un poco la imagen que nos sujeta con una soga, al pender boca abajo, vemos lo que acontece desde otra perspectiva. Somos materia y espíritu. Si solo vivimos enfocados en lo material, difícil ser felices. Si solo ponemos foco en el espíritu, es complejo sobrevivir.
Arcano 13 – La Muerte (y la transformación): Es un numero único, no es múltiplo de nada, es incomprensible. Por eso lo han designado como de “mala suerte” pero se vincula a lo ying, a lo intuitivo y a nuestra conexión con el Universo.
A muchos les atemoriza pensar en la muerte. Sin embargo, es fascinante ya que la muerte y la transformación que conlleva, es nuestra diaria compañera. Simboliza algo permanente, dado que, de algún modo, vivimos cambiando y muriendo todo el tiempo.
Nada es igual en nosotros ni en la naturaleza. Hasta el estado de nuestras células cambia minuto a minuto y en dos años se regeneran por completa dice la Medicina actual. Así como fuimos bebes, luego fuimos infantes, escolares, adolescentes, … Cada etapa evolutiva “muere” para dar paso a la siguiente. Actualmente, en que la soledad es un tema complejo de abordar en todo el mundo, es importante construir un buen mundo interno, comparte Silke:
“Cuando murió alguien muy querido para mí, él se fue solo y yo quede sola. El dolor hay que transitarlo igual, pero el mundo interior, un entorno íntimo propio donde estar bien con uno mismo, es una gran compañía, llena de comprensión”.
Por lo tanto, un buen modo de comenzar a construir ese mundo interno, es conocerlo. Conectar con lo que impide desarrollar nuestra interioridad nos hace rever nuestras falencias, emociones muy humanas como la culpa o la bronca por las equivocaciones que cometimos. que se hizo o no se hizo, por lo que paso o no pasó. Hay que asumir y aceptar lo que fue como fue, porque nadie es perfecto. Es parte de ser humanos este aprendizaje.,
Es tiempo de soltar, de saber despedirnos y de apreciar la vida en todo momento.
Arcano 14: La Templanza Aquí cierra el segundo septenio. Hay dos siete y un Ángel en el medio que vierte sus líquidos, plata/ oro, hombre/ mujer… En esta etapa comprendimos las polaridades y que todo está relacionado. Hay una horizontalidad en este vertedero, pero nada se mezcla.
En el templo, nos acercamos a lo Divino, pero no nos mezclamos, de ahí la templanza. Antes las polaridades están separadas, al estar totalmente en lo opuesto, proyectamos lo que queremos que sea. Ahora las polaridades son cercanas. Hemos trabajado poco a poco y llegamos al gran amor porque realmente nos importa el otro. Ya no se trata de enamoramiento, Cuando amamos de verdad, queremos conocer al otro en profundidad. Lo queremos ver y comprender profundamente y para nosotros anhelamos lo mismo.
TERCERA ETAPA
A esta altura comprendimos que no hay bueno ni malo, solo hay en una escala de grises…
Arcano 15 – El Diablo La imagen enérgica de colores vibrantes, es cautivante, nos habla de un mundo de energía. Donde la más fuerte, es la del amor y la que le sigue en empuje, es la de la agresión y hay que saber sublimarla hacia el bien. Un cuchillo puede ser agresivo, pero en manos de un cirujano, salva vidas… Hay muchos ejemplos sobre esto.
“Cuando hay demasiada energía, el deporte es un modo de canalizarla y si no, ¡hay que ser artistas!”, Silke.
Arcano 16 – La Torre: Las muletas que sirvieron antes no son necesarias. Se deshace lo que ya no es para nosotros. Es un momento difícil e importante. El sostén se derrumba y lo que queda es para lo que uno nació. A veces nos resistimos a los cambios. Aun cuando sabemos que algo no da para más y está listo para dar lugar a un cambio y pasar a otra etapa; la zona de confort nos tienta a quedarnos donde estamos. Por eso aquí todo se derrumba.
El tres, el triángulo, simboliza la espiritualidad. El cuatro en los cuadrados, refiere a las estructuras rígidas que aparecen en la imagen y deben derrumbarse.
Es común escuchar decir: “toda la vida lo hice así” … Nos resistimos a cambiar, incluso a aceptar restricciones del cuerpo y sus cambios cuando pasan los años. Sin embargo, hay cosas que ya no podemos hacer igual que antes. Si soportamos este derrumbe, lo que queda es lo que hace a nuestro propósito, eso único que traemos para aportarle a la vida.
Arcano 17 – La Estrella: Si pudimos soltar, llega nuestro momento “estrella”. A partir de saber para que nacimos, los impedimentos u obstáculos se desvanecen y el Universo nos apoya. Si nos quedamos colgados llorando por lo que perdimos, no alcanzamos este tiempo rutilante.
Un ejercicio para descubrir que vinimos a Ser y hacer, es el que la artista realizara a sus 33 años: Hay que poner un pincha papeles en la mesa de luz e ir colocando papeles donde anotamos que nos hizo feliz hoy. Desde lo simple a lo más sofisticado. Una palabra, un gesto, una actividad…
Al finalizar el día, en un momento silencioso, los quitamos. Ordenamos el contenido por temas y notamos lo que predomina. ¡Hacia eso debemos encaminarnos! Vinimos a ser felices, pero a veces el solo hecho de ser humanos, nos aleja de hacer lo que nos gusta y nos hace bien.
La receta de Silke, es hacer mucho de lo que le gusta y lo menos posible de lo que no le gusta. “Parece que funciona” comparte, soltando otra carcajada que se une a la del público al unísono.
Arcano 18- La Luna: Simboliza el subconsciente. La luna refleja la luz del sol, y así nosotros, reflejamos lo que somos en nuestro entorno. Solo podemos ver fuera lo que ya tenemos. Un momento áspero asociado a lo que no queremos reconocer. Cuando podemos abrazar nuestras oscuridades, la luna nos regala serenidad con uno y con los otros, a partir de comprender que no somos perfectos.
Arcano 19 – El Sol: Durante la realización de este tapiz, Silke “percibe unos “ojos” que la miran desde arriba los cuales se aprecian en la parte superior de la imagen de este arcano. El sol, representa el aspecto consciente del sí mismo. Es lo diurno, alegre y pleno, como la energía radiante del nacimiento. En ese sentido, se asocia al niño interior.
Es un aspecto de integración y logro, de encuentro de la identidad, como cuando nos miramos erguidos frente al espejo y podemos decirnos: “Soy yo”. Es el Yo soy, con mis valores y talentos potenciales. Sabiendo que hay baches y temas a pulir, encontramos aquí esa luz carismática en nosotros con la que salir a darnos al mundo. Es el amor universal, a la vida, hacia el ágape.
Arcano 20 – El Juicio: La justica en los arcanos, no es algo que venga del exterior. Hacia el final del ciclo de la vida, revemos el camino que transitamos en este bosque de experiencias. Inicialmente denso con nuestros problemas y equivocaciones, hacia lo más claro y liviano, mientras aprendemos.
Hacia arriba, se ve un triángulo y dos brazos abiertos. Ignoramos en que momento, lugar o circunstancias llegaremos allí, pero sabemos que más allá de esta vida, somos esperados…
Aquí, es donde nos sinceramos interiormente para renacer. Nos preguntamos que hicimos con nuestra vida y ese germen de chispa divina en nosotros, para revivirla. Evaluamos si nos comprometimos, si la aprovechamos al máximo o tratamos de zafar, pensando que nadie mira…
Cada persona que ha llegado a nosotros es la correcta. Las que nos han dañado o nos han sumido en un pozo, nos han hecho crecer y considerar otras valoraciones. Nos han fortalecido de algún modo. Junto a las personas que nos han querido, contribuyen en tener una vida maravillosa.
Arcano 21 – El Mundo: En este cierre de ciclo, volvemos al ovalo del inicio, pero maduros, integrados. En armonía con todas las manifestaciones previas y con el universo, hacia nuestra mejor versión. Es la evolución del arcano del colgado, aquí en postura de puntas de un pie, como Krishna tocando la flauta. Ahora “sabemos”. Todo es energía y luz. Invisible y existente, como la esencia de nuestro Ser.
Los Arcanos en seda son una de las tantas series de Silke que produce a partir de su incansable búsqueda para comprender misterios insondables del origen:
¿Quiénes somos, de dónde venimos, hacia dónde vamos?
Series, procesos, tienda de libros, cartas y glicées: